"This is not the sound of a new man or a crispy realization. It's the sound of the unlocking and the lift away. Your love will be safe with me."

martes, 19 de junio de 2012

Sin básculas de por medio

En tiempos recientes hemos estados viendo la preocupación que existe por la obesidad infantil y adulta, un problema de salud pública que ha sido tratado a fondo por las autoridades y difundida por los medios de comunicación. Es plausible dicha preocupación por el asunto, pues, este va incrementado. Al mismo ritmo que el mundo se ensancha, lo hacen las caderas; sumando a la ansiedad y estrés que se viven cotidianamente y que obliga a buscar un medio para deshacernos de ella.

Esta ocasión, no vengo a hablar de la obesidad como un problema evidente que engloba muchas causantes desde un punto de vista medico, sino, como un tema más allá de una consulta, una rutina de ejercicio o una alimentación balanceada. Me interesa ver el lado humano de la gente que sufre obesidad, ya que, han sido pisoteados por una sociedad en la que un cuerpo perfecto es cartel suficiente para abrirse paso a la cúspide y sentirse superiores. Desde mi perspectiva particular, un cuerpo de medidas, sino perfectas sí promedio, no es estrictamente sinónimo de un estado saludable ni mucho menos de ventaja.

En el modelo de sociedad que vivimos nos han hecho ver que un cuerpo escultural es igual a una mejor vida. Insisto, no me sumergiré en lo medico pero no niego que tenga sus ventajas el cuidado personal; lo que sí niego es que, el numero de kilogramos en una persona no es equivalente a su felicidad. En ese bombardeo de imágenes en las que estamos envueltos nadie se detiene a decir que incluso las personas con cuerpos de modelos o esbeltos también sufren de problemas de salud que alguien con obesidad puede tener; ni mucho menos que la belleza, capacidad y disposición es una cuestión más psicológica que corporal.

Muchas personas que se ejercitan o quienes siguen programas para bajar de peso se escudan en la cuestión de salud para justificar lo que hacen pero me pregunto: ¿cuántos lo harán por lo infundado a traves de los medios? ¿Cuántos lo harán por un convencimiento personal mínimo? Tan importante llega a ser que una persona esté esbelta que hasta las opiniones cambian incluso si es la misma persona. ¿Qué vemos en lo programas de televisión? Siempre gente con cuerpos finitos, sonrientes y con entusiasmo, mientras que, las personas de peso son enfermas, perezosas o humilladas; cada una de esas características se adhiere a cada una de ellas y es la semilla para formarse la ideas que después se ponen en juego en el trabajo o en la escuela.

Definitivamente, la información es fundamental en cualquier cosa de la que se desee hablar o mostrar. Lamentablemente la información que se presenta es selectiva y sólo llega a oído y vista de las personas lo que se desea. Si a la gente se le dijera que incluso un persona con sobrepeso puede ser feliz en cualquier ámbito o proyecto que emprenda en su vida, si a la gente se le dijera que las cuestiones de salud tienen que ver tanto la genética o herencia y no a un par de productos milagrosos o a dejar de comer pastelillos, si a la gente se le dijera los porqués antes que los cómos el concepto de obesidad sería concebido de mejor manera y menos discriminatorio en pro de no mirar al obeso con ojos despectivos.

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