"This is not the sound of a new man or a crispy realization. It's the sound of the unlocking and the lift away. Your love will be safe with me."

viernes, 21 de marzo de 2014

El errático: paso siete de siete

¿Quién soy yo? Eso no importa. Lo importante es la afronta ante lo errático, como me apodaron mis detractores después de haber fallado más que Palermo y Pilatos en el mismo acto. Desde tiempos de mis abuelos la ansiedad ha sido mía. Soy atracción de mi propio safari. Soy el león que al fondo contempla; soy el peón en el tablero sobre la mesa. Unas cervezas no caerían nada mal en esta árida estepa. Soy Pípila de mi legado: la ambición del árabe, la altivez del británico, la tarabilla del veracruzano y el monoteísmo de un puerto acechado por lo infame. El trópico... ese lugar donde el sol calienta hasta el nous y donde el frío es más ausencia de acción. Home sweet home.

¿Por qué escribo? Porque es la mejor manera de convivir conmigo. A veces soy Nietzsche y grito Dios a muerto, otras veces soy Jesucristo y resucito al tercer día de muerto. Autista de tiempo incompleto, me dedico a unir vocales y consonantes como quien aún cree en el matrimonio de tiempo completo. Soy el hombre que llega a la panadería a las 4:50 cuando abren a las 5:00; diez minutos son la diferencia entre un obsesivo-compulsivo y un limítrofe empedernido. El amor es una piedra en el camino en esta ciudad. Algunos tropiezan, otros se hacen notar. "Lo importante es saber llegar" dice aquella canción que quién sabe cómo llegó a mi auricular. Y mientras mis vecinas ríen y acaban por llorar, yo me dedico a psicoanalizar a Lacan con su imago especular.

sábado, 15 de marzo de 2014

El errático: paso seis de siete

Hay cosas que sabemos cuándo acaban. La novela de la diez, la caja de Corn Flakes, el rollo de papel, la tinta en la HP, la leche para el café, el clásico entre Boca Jrs y River Plate. ¿Pero cuándo sabemos que el amor acaba? No es algo que necesite de pesaje, de sopesarse o de estar frente a un juez y dar parte. El amor no tiene fecha de inscripción pero al parecer manda reportes y suspensiones. "El amor sería más fácil si se pudiera pronunciar" dice un hombre curtido en lenguas extranjeras —inglés, francés, cualesquiera— pero incapaz de comprender un lenguaje sin vocales ni consonantes. El TOEFL es un domingo en Six Flags frente a este teorema experiencial.

¿Son sabias las palabras o sabio es quien toma la palabra? Siempre he dicho que la diferencia entre alguien con y sin modales es aquel que cede la palabra. Como el conductor que cede el paso al peatón, el hombre que cede el asiento a una mujer, el hombre que prefiere leer en vez de ver TV. La vida es una cortesía. Hoy estoy aquí, generando alegorías, combatiendo alevosías; mañana soy presa de mi propia carnicería. Las calles toman sentido a estas horas. No hay vueltas en U ni etiquetas rojas en las mallacorlas. El silencio se abre espacio entre el hombre; algunos lloran de felicidad, otros follan y lo llaman selección natural. El silencio siempre promueve. Aunque sugiere no callar más de lo que se debe.

miércoles, 12 de marzo de 2014

El errático: paso cinco de siete

"Para mi un número es una representación. Nunca un aforismo. Como en el fútbol, un 5-0 dice algo pero nada al mismo tiempo. Así como hoy a mis 50 años no significa que haya vivido más tiempo". Son las palabras de un hombre que ha cumplido lo suficiente como para saber que los años son hijos de la estadística y no evidencia inequívoca de vida. La mejor parte de venir al café de medio día son esta clase de declaraciones de vida que dan más luz y sentido que todos los corridos que retumban entre callejones. Aquí las canas cuentan. Es el requisito de inscripción, la credencial de elector, la palabra secreta. Aquí no hay jerarquías ni sabiduría ni doctorados: sólo un cuarteto de jubilados que hablan en tiempo pasado.

"Cómo han cambiado las cosas" arroja al viento el más provecto del cuarteto. Para él la vida se ha ido degradando como aquel gris edificio donde las hazañas se revelaban en blanco y negro y que ahora se han tornado de un tono amarillento. Tiempos de vecindades y juegos en las calles. Tiempos de papalotes, baleros y reinos en los cielos. En alguna parte de esta anestesiada ciudad, alguien lleva serenata a su amada recordando que aún hay amores que se gozan debajo de una ventana. Y hay algo que no puedo evitar reflexionar: hay más rosas en funerales y carrozas que en manos de mujeres hermosas; señal de que el tiempo no es inmune a su tic tac.

lunes, 10 de marzo de 2014

El errático: paso cuatro de siete

¿Ausencia física, es ausencia en realidad? "Dios está en todas partes" dice Doña Ana, viuda y madre olvidada, al salir de la iglesia a la que con fervor va cada domingo. Siempre he pensado en esa expresión. Más nunca he entendido por qué no es lo mismo en los seres vivos, con las personas que deambulan plazas, casas o carcasas. Recuerdo que cuando mi padre se iba a trabajar, mi madre sentía una ausencia, un vacío existencial. La formula (mi madre era toda una Pitágoras en cuestión de emociones) era simple: al no tenerte la nada está presente. No comprendí lo equivoca de su formula hasta ahora. "Dios existe porque está en nosotros" continua Doña Ana, al tiempo que me pregunto si mi padre existía en la mente de mi madre.

El tiempo es un canalla. Qué rápido se oscurecen las calles cuando la nada deambula con desparpajo. Una niña levanta el brazo tratando de asir algo, una pareja se funde en lo incógnito y una sirena de fondo recuerda al peatón que alguna vez fue paranoico. A lo lejos, Doña Ana parte a paso lento, no sin antes haberme dejado la última de las moralejas: "Dios está contigo", dice, al tiempo que sonríe como quien sabe ha hecho algo bueno con su palabra. Yo me quedé todavía un momento más en la banca a mis espaldas, en una especia de oda al pensador, vagando por mi mente y preguntando: ¿cómo es posible que el tiempo avance sin siquiera dejar un mensaje en la puerta?

sábado, 8 de marzo de 2014

El errático: paso tres de siete

Hay algo en la euforia que me parece cruel. Cuando las emociones se desbordan, y ese magma que son las lágrimas o esa erupción que maximiza toda pulsión no se controla, pasa lo que al aficionado de fútbol que todo lo convierte en Maradona o, en el peor de los escenarios, en el Alcorcón de la Segunda División Española. ¿Cómo sobrevivir en un mundo que ensalza la alegría pero que reprime la tristeza o, más irónico aún, especialista en vociferar defectos pero incapaz de enumerar virtudes? Ahora entiendo por qué tanta patología, anomalía, suicidios, genocidios, "Venga la Alegría", "Usted puede sanar su vida" y gente con más telarañas que certezas.

Dos niños pasan corriendo frente a mi. Un motociclista se llena de adrenalina. Una luz se enciende detrás de la cortina. A lo lejos se escuchan risas y alguna que otra persona discutir. "Tengo un problema que lleva mi nombre" escribo en mi libreta como recordándome que el mundo es un lugar mejor si estoy aquí. Llevo mis manos a los bolsillos y en estos momentos recuerdo aquella advertencia que un agradable desconocido me daba a mi: "Algún día recorrerás el camino que he pisado y te preguntarás cómo pude ser tan imbécil y solo haber mirado".  Tiempo después me enteré que este celebre desconocido había fallecido. En ocasiones la muerte no es tan mala como pensamos. Y si no pregúntenle a Kurt Cobain o Jim Morrison que de seguir vivos serían tan anecdóticos como cualquier hijo de vecino.

viernes, 7 de marzo de 2014

El errático: paso dos de siete

La alarma suena y el día comienza en crepúsculo. La radio puede ser una tortura cuando Pedro Infante le canta al amor como quien clama por lluvia o una buena cosecha; algo digno de Mayas, Aztecas o cualquier otra necesidad intrínseca. La luz se asoma. ¿Qué tan verde es un árbol a oscuras? Lo suficientemente gris para sobrevivir. La fotosíntesis es una necesidad botánica; el oxígeno prolonga la vida humana y la paráfrasis hace de Cortázar un personaje de pasiones mundanas. ¿Qué sería de la vida sin esta nada? Me pregunto al tiempo que aquel anuncio de Rolex expone mi falta de buen gusto y amores.

Uno simplemente no se levanta y comienza "un nuevo día". Así como el artista no se deslinda de su obra anterior. Un día Gabriela vecina mía, amiga mía y fiel amante de Gonzales como buenos días— se vio decidida a olvidar a Javier. Las cosas no andaban bien. Pero se dio cuenta que la simple iniciativa no es suficiente. Que "empezar de cero" es la mentira más condescendiente detrás de la vida después de la muerte. Basta más que un rifle para ser cazador. Basta más que una guitarra para ser trovador. ¿En qué acabó todo? En una plática entre dos. All you need is talk...

jueves, 6 de marzo de 2014

El errático: paso uno de siete

Hay mensajes que llegan a nuestros oídos como aquella distinguida expresión de tan arquetípico personaje nacional: sin querer queriendo. Muestra contundente de que hay quienes escriben cartas y quienes susurran al viento el más convincente de los argumentos. Aquella era una tarde en la que el cielo estaba despejado, el sol radiante y las palabras deslizantes aterrizaban sin el mayor inconveniente en una pista que con frecuencia atiende aterrizajes forzosos y alguno que otro paracaidista kamikaze.

Me habían acusado de impío, de negligente, de autista, de pésimo matemático pero nunca de esquimal. ¿Será por el frío en nuestra comunidad o por el iglú que se ha vuelto mi departamento? Una especie de ausencia de afecto y vidrios rotos. Un lugar donde las goteras crean conexiones neuronales que dañan las molduras del techo. La naturaleza puede ser aliada y enemiga al mismo tiempo. Las bajas temperaturas es la causa número uno de divorcios, paralelamente, une más cuerpos que simposio. Ironías en tiempos de profecías.

lunes, 3 de marzo de 2014

...

¿Qué preferirías: brillar o volar?
Y, brillar es actuar. Encender la veladora; el encuentro entre la luz y su reflejo. Volar es desafiar. Encarar la gravedad y arrojar su fuerza por los suelos. Definitivamente, escogería brillar. Porque volar hasta con los pies por delante.